Palabras de antaño: Milán Jorge Dimitri

Milan Jorge Dimitri, nació en Buenos Aires, el 3 de febrero de 1913, a los dos años su familia se trasladó a Punta Arenas, Chile, país donde realizó sus estudios primarios.

De nuevo en la Argentina, la familia se radica en Concordia, Entre Ríos, donde cultivaban cítricos y tenían productos de granja que él atendía.

En 1937, se emplea en Buenos Aires como ayudante técnico en el "Laboratorio de Botánica C. Spegazzini" del "Ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación", comienza así su amor por la Botánica.

Fue jefe de "División Sistemática" del "Instituto de Botánica Agrícola" del MAG de la Nación, de 1943 a 1953, asesor botánico de la Academia Nacional de Medicina de 1943 a 1945; Director de "Protección de la Naturaleza en Parques Nacionales" de 1953 a 1969, donde promueve la realización de un herbario de las floras de los Parques Nacionales Argentinos.

En 1955 inicia la carrera docente universitaria ocupando varios cargos, llegando a Decano y luego Profesor Emérito de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Plata, Rector de la Universidad Nacional de Río Cuarto y Decano Fundador de la Facultad de Agronomía de la Universidad de Morón.

Fue además investigador del CONICET en la Cátedra de Dasonomía de la Facultad de Agronomía de la UBA.

Publicó más de 100 títulos, especialmente de botánica y colaboró con otros tantos trabajos del tema, así como de ecología y conservación de la naturaleza.

Fue además impulsor de proyectos de creación de parques y reservas nacionales como Parque Nacional El Palmar en Colón, E. Ríos, Parque Nacional Lihué Calel en La Pampa y la Reserva Natural Formosa.

Falleció en la localidad de Florida, Provincia de Buenos Aires, el 21 de febrero de 1994, parte de su obra se encuentra aún inédita.

Para su recuerdo en este aniversario de su nacimiento tomamos el siguiente párrafo de “Pequeña flora ilustrada de los Parques Nacionales andino – patagónicos”. Publicación Técnica nº 46 (separata de Anales de Parques Nacionales,tomo XIII, p. 1-122, 1974.

“…Conocer las plantas autóctonas de un Parque Nacional, es uno de 1os medios mas seguros para llegar a compenetrarse de la biología e interrelaciones que las unen entre si y con el medio ecológico, no como algo fortuito y causado por el azar, sino respondiendo a leyes naturales sabias y rígidas, cuyo incumplimiento o desconocimiento acarrea serios trastornos, muchas veces irreversibles.

Es la mejor manera de interpretar el porque de la existencia de 1os Parques Nacionales, reconocer que en ellos la Patria guarda preciados tesoros de 1os que todos debemos gozar, pero también ayudar a proteger…”