Acerca de un quimilero cautivo...

Autor: Diego Ortiz y Mariana Maloberti

El día martes 02 de noviembre del corriente año, llegamos a San Pedro de Colalao (Departamento Trancas, Provincia de Tucumán). En el marco de nuestro viaje, decidimos visitar la tan promocionada Reserva Fitozoológica Dr. Carlos Pellegrini. Al llegar al lugar y comenzar el recorrido, vimos que, lo que en un principio se promocionaba como “reserva” se imponía claramente como un zoológico. Esta contradicción acerca de lo que la institución ofrece en palabras y lo que realmente allí encontramos, pasó a segundo plano cuando nos hacemos conscientes de que se trata de un zoológico alejado de toda lógica vinculada al bienestar animal y, mucho más aún, de cualquier intención conservacionista.

Más contradicciones aparecen en el circuito del zoológico, ya que son recurrentes los carteles en los cuales se leen mensajes que incentivan el cuidado al medioambiente, a pesar de que esta intencionalidad queda solo en letras, sin aparecer plasmada en las prácticas vinculadas a los animales de su plantel, ya que el descuido y la falta de requerimientos sanitarios del lugar son una constante a lo largo de todo el recorrido.

Tras estos mensajes contradictorios, la institución objetualiza a los animales, transformándolos de recursos naturales que debemos proteger y respetar, a recursos de exhibición que se poseen con fines vinculados más al entretenimiento que a una toma de consciencia conservacionista. Este es el marco que contextualiza los animales que allí encontramos, los cuales incluyen especies autóctonas con prioridad de conservación, como ser: Águila Coronada (Harpyhaliaetus coronatus), Guacamayo Verde (Ara militaris), Tirica (Margay tigrina), Margay (Margay wiedii), Tapir (Tapirus terrestris), entre otros. Un animal que completa esta lista llamó especialmente nuestra atención, es así como con gran sorpresa encontramos en uno de los recintos un individuo de Chancho Quimilero (Catagonus wagneri=Parachoerus wagneri). Nuestra sorpresa radica en que teníamos conocimiento de que se trata de una especie incluida en CITES I y en peligro crítico a nivel nacional, pero fundamentalmente por que se trata de una especie sobre la que se tiene muy poca información en nuestro país. A esto debemos sumar el hecho de que este quimilero constituiría el único en cautiverio en Argentina ya que, según Chebez (2008), no se conocen en el país ningún plantel cautivo, a no ser de un ejemplar que se mantuvo en el Zoo de Presidente Roque Sáenz Peña en Chaco.

Dicho animal se mostraba bastante inquieto ante la presencia de los visitantes, manteniéndose retraído en la parte posterior del corral donde se encontraba, sin cartelería alguna que lo presente ni explique su importancia. Trozos de zapallo y granos de maíz dispersos por el recinto nos permitieron tener idea acerca de la alimentación que se le estaba suministrando. Por otro lado, al preguntar al personal que allí trabaja tuvimos noticia sobre el desconocimiento de su procedencia, aunque su llegada era bastante reciente (no más de mes y medio).

Esta situación motivó la presente nota, en parte por el reconocimiento de la importancia e interés que radica la presencia de este animal, aunque también por encontrarnos con especies con prioridad de conservación mantenidos en cautiverio bajo condiciones que deben ser convocadas a discusión. Consideramos que estas situaciones pueden convertirse en detonantes para desarrollar una visión más crítica acerca del valor de los animales mantenidos en cautiverio, que muchas veces se alejan de los criterios conservacionistas, convirtiéndolos en objetos que se apropian para fines lucrativos que atentan contra la preservación de las especies.

Bibliografía
Chebez, J.C. 2008. Los Que Se van. Fauna Argentina Amenazada. Tomo 3: 182 pp. Albatros. Buenos Aires.



17 de Noviembre de 2010

Comentarios



  1. #1   Francisco Lucero dijo: 17.11.2010 - 11:03hs Excelente nota, por lo que comentan hay varias especies amenazadas, no tiene ningún sentido tenerlas aisladas ahí, felicitaciones por exponer y mostrarnos esta situación, saludos.

  2. #2   Magali dijo: 17.11.2010 - 14:04hs Muchas gracias por mostrar la verdadera situación de estos ejemplares,me gustaría saber si se tomó alguna medida o si se realizó una denuncia ante alguna autoridad al respecto,Muchas Gracias

  3. #3   Matias dijo: 17.11.2010 - 15:40hs El zoo de San Pedro es algo verdaderamente triste donde se mantienen animales en muy malas condiciones, e visto como a los monos caraya la gente le lanzaba de todo hasta cigarrillos encendidos y el personal del lugar no hacia nada, una cria de oso negro que andaba suelto por el lugar y su hermanito le faltaba una patita se podia ver la carne viva y nadie hacia nada.
    Tambien tienen animales que no mencionan aqui como ser yacutingas, yaguarete, guacamayos , oso hormiguero, todo tipo de especies exoticas y aves autoctonas, que espero que todabia esten porque de un dia para el otro los animales desaparecen una vez llegaron a tener un aguara guazu y cuendo visite nuevamente el zoo ya no estaba.
    Penosa la situacion

  4. #4   Carlos Alderete dijo: 18.11.2010 - 21:03hs Ese lugar esta lejos de ser una RESERVA! solo se puede ver fin de lucro mediante la exposición de animales salvajes! Los felicito por la nota!... Ya es hora que la gente tome conciencia y defienda los recursos naturales y animales autoctonos que desde siempre formaron parte de nuestra cultura en muchos sentidos! Realmente espero que esta nota sea el detonante para que la autoridades tomen cartas en el asunto y no se permita realizar estos tipos de actos de maltrados para con los animales en todo el país!

  5. #5   Maria Huerta dijo: 21.11.2010 - 11:22hs La ley Nacional 14.346 tipifica como delito determinadas acciones que perjudican a los animales: el tema de la alimentación es una de ellas. Sería importante conocer cuákl es el organismo de contralor de este tipo de Instituciones a fin de que tomen intervención en la situación que se describe.

  6. #6   nicolas iribarne dijo: 02.04.2011 - 19:41hs esta muy bien todo, pero con un gobierno corrupto 100% todo esto nunca va a llegar a las instancias de una buena sentencia, nose si soy claro, esa denuncia llega a un cajon mas del corrupto juez que tome la causa; si realmente queremos cambiar esto hay que escrachar a todos los politicos corruptos que se candidatean para las proximas elecciones y leer bien las boletas y botar a conciencia.
    Este es un tema del que año tras año los gobiernos corruptos vienen armando con planes mentirosos como las pensiones, jubilaciones, desinteres por educacion publica y gratuita, falsas promesas y un sinfin de cosas tramadas y bien logradas para que nosotros seamos cada vez mas brutos e ignorantes ;
    SI NO CAMBIAMOS ESTO SEGUIREMOS SIENDO OVEJAS DE GANADO

  7. #7   Tomy Martinez Ribo dijo: 01.07.2011 - 10:35hs La verdad que este espécimen como ya se sabe esta en grave peligro debido a que es muy buscado por su carne y por ser un animal de gran valor.. Muchas Gracias por exponer el tema y darlo a luz.

  8. #8   Ana María Pereyra dijo: 23.10.2012 - 19:48hs En Febrero pasado fui a la reserva. Realmente da pena ver el estado de algunos animales. A su situación habitual se suma la falta de vigilancia para con los ocasionaales visitantes que, sorprendentemente, y pese a los carteles de advertencia dan de comer golosinas y helados empaquetados a los monos y demás animales.
    Espero que realmente se ponga más atención a las políticas referidas a la conservación del medio ambiente, y a la educación de nuestros hijos en ecología.

  9. #9   Delfina Teran Vega dijo: 25.07.2013 - 15:55hs Yo como alumna del Instituto debo decir que los animales no estan en malas condiciones, los leones estan bien alimentados, yo cada vez que voy tengo la suerte de ver la visita de algun veterinario atendiendo a los animales asi tambien del proceso de alimentacion de los mismos. En vez de criticar tanto, si no les gusta, no vallan, dejen de fomentar esto, y si tienen alguna queja vallan a la Institucion directamente, publicando noticias en facebook y en paginas web no logran nada, solo quemar a un colegio. Un beso.



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