El 22 de mayo se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Diversidad Biológica, para conmemorar la aprobación de la resolución 54/221, de 22 de diciembre de 1999, relativa al Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). Este año el tema elegido es “Los océanos y la biodiversidad marina”.
Los océanos cubren el 71% de la superficie del planeta y constituyen más del 90% de la superficie habitable del planeta, brindando bienes y servicios ambientales vitales para la humanidad. Desde tiempos inmemorables la gente ha vivido en las costas y ha pescado en el mar. Hoy en día se estima que el 41% de la población mundial vive a menos de 100 km de la costa y la pesca proporciona más del 15% de la ingesta diaria de proteínas de origen animal.. Además de alimento, la biodiversidad marina es la base para numerosos productos farmacéuticos a partir de las toxinas de algunas especies, que sirven por ejemplo contra el cáncer. Asimismo, los ecosistemas costeros prestan importantes servicios ecosistémicos, como el turismo y la protección frente a eventos climáticos extremos.
La Argentina tiene una plataforma continental que se ubica entre las más grandes y biodiversas del mundo (más de un millón de km2). Debido a su elevada productividad costero–marina es una zona de gran relevancia para la conservación y para las economías locales y regionales. La costa que va desde Bahía Blanca hasta el Canal de Beagle se extiende por más de 3.500 km, mostrando una alta diversidad biológica, geológica y climática. En ella hay grandes concentraciones de aves y mamíferos coloniales y varios sitios de relevancia internacional para el descanso y alimentación de aves migratorias.
Nuestro país ha dado importantes pasos para avanzar hacia la protección de su región costera a partir de los años 70. Actualmente el país cuenta con 45 Áreas Protegidas Costero Marinas con distinto grado de manejo que protegen algunas de las principales colonias reproductivas de aves marinas. Entre ellas cabe destacar las que protegen el 50% de las colonias de Pingüinos de Magallanes y los sitios de reproducción del Atlántico Sur de Elefantes Marinos del Sur y Ballenas Franca Austral. Otra área significativa es la Reserva Costa Atlántica Tierra del Fuego, el Sitio Ramsar más austral del mundo. Esta reserva es uno de los lugares más importantes del país en cuanto a concentración de poblaciones de aves playeras y ha sido incluida en la Red Hemisférica de Reservas de Aves Playeras (WHSRN). Así mismo se conoce que alrededor de 21 especies de cetáceos usan las aguas de la Costa Atlántica de Tierra del Fuego, en algunos casos para reproducción o alimentación en áreas de marea. A pesar de estos avances, la protección de la zona terrestre y los hábitats costeros y marinos no es equilibrada ni suficiente. Menos del 1% del mar está protegido, y ésta protección se distribuye desigualmente entre las diferentes bio-regiones marinas. En tal sentido es necesario lograr la implementación de políticas efectivas para una gestión sustentable de la biodiversidad y de ecosistemas marinos que constituyen el patrimonio natural de los argentinos.
Comentarios