Por primera vez, un estudio científico logró captar el recorrido que hace una ballena franca austral desde que abandona Península Valdés hasta que regresa.
El ejemplar macho juvenil marcado en octubre de 2014 como “Papillón” regresó luego de seis meses al Golfo Nuevo, específicamente el 20 de mayo, permitiendo conocer en su totalidad el recorrido que realizó desde su última visita a la costa de Puerto Madryn. El proyecto mediante el cual se hizo el registro satelital responde a recomendaciones de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), donde Argentina cumple un rol fundamental en el desarrollo de un Plan de Manejo para la Conservación (CMP) de estos cetáceos.
Se les colocaron transmisores a cinco ejemplares, los que muestran una diversidad considerable en sus recorridos. Dos de ellos dejaron de enviar datos cuando estaban en aguas de la Islas Georgias del Sur, área que se cree es una de las principales zonas de alimentación para esta población. Las otras tres ballenas pasaron tiempo en el borde del talud continental.
Pero el macho joven nombrado “Papillón” registró la trayectoria más larga de todas las ballenas marcadas, y se mantuvo todo el tiempo cerca del borde de la plataforma continental argentina, aproximadamente a 300 millas de Península Valdés, durante los seis meses que estuvo en mar abierto.
Periplo de seis meses
El oceanógrafo Guillermo Caille, coordinador regional de Fundación Patagonia Natural dialogó con FM Tiempo 99.1 y remarcó el trabajo que se inició allá por el mes de septiembre del 2014, cuando se decidió poner un transmisor a las ballenas francas para poder conocer su recorrido. “Se marcaron cinco ballenas y de la primera de ellas, la que todavía sigue transmitiendo, que fue denominada “Papillón”, tenemos el registro completo de todo su recorrido desde que en octubre del año pasado dejó las aguas del Golfo Nuevo y regresó este 20 de mayo”, destacó con profunda alegría por el valor de esta información científica para la ciencia y la conservación.
De esta forma Caille también hizo mención al recorrido del ejemplar, que “el 17 de octubre se lo marcó, y los chicos lo denominaron “Papillón”, porque ni bien se lo marcó rápidamente se alejó de la zona, estuvo seis meses transmitiendo, lo cual significa que la tecnología tiene un desempeño muy superior al que pensábamos”, dijo y agregó que “se fue desde la boca del Golfo Nuevo hasta el límite de la plataforma argentina, las 200 millas, estuvo sobre el talud, entre lo que sería el centro de la provincia del Chubut y el norte de la provincia de Santa Cruz, y empezó el regreso. Se notó cerca de la costa hace una semana, sobre la zona de Playa Unión, y hace dos días entró por la boca del Golfo Nuevo y se dirigió casi en línea recta hasta la zona de Pardelas y se mantiene entre el frente de Pirámides y zona de Punta Ameghino”, sostuvo.
En ese sentido se remarcó que “es el registro más largo del que se tiene conocimiento, el cual tenemos, donde se ve un periplo muy importante de seis meses, y donde podemos por primera vez responder a dónde se van las ballenas cuando dejan las costas del Golfo Nuevo. Adónde van y cuándo regresan, son las preguntas, pero no es la única porque las otras cuatro han tenido recorridos diferentes. Dos fueron a las Georgias, otra un poco más para el norte, pero esta es la única que ha completado el recorrido migratorio hasta ahora”, destacó el representante de Fundación Patagonia Natural dentro del programa.
Un sueño posible
Para Caille es importante remarcar el trabajo que se ha venido llevando adelante en conjunto con otras instituciones de la ciudad portuaria, y de la provincia.
“Siempre quisimos responder a dónde iban, qué hacían cuando dejaban las aguas del Golfo Nuevo, y la tecnología avanzó en estos 10 años para permitirnos concretar ese sueño, hacerlo posible para que este tipo de dispositivos a su vez no implicaran riesgo para el animal, y tener el conjunto de organizaciones las autorizaciones para poder realizarlo”, dijo, afirmando que “esto es un inicio, un paso para el estudio más concreto de esta especie, lo que nos permitirá avanzar también en la conservación, en esta zona y en la Patagonia, también teniendo en cuenta el afecto que los chubutenses tienen por esta especie y el valor que se le da”, comentó por FM Tiempo 99.1 Puerto Madryn.
El proyecto
El proyecto responde a recomendaciones de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), en la cual la Argentina cumple un rol fundamental, desarrollando un Plan de Manejo para la Conservación (CMP) de la Ballena Franca Austral.
La iniciativa es posible gracias al trabajo conjunto de varias organizaciones: Wildlife Conservation Society, el Instituto Aqualie de Brasil, la Fundación Patagonia Natural, la National Oceanic and Atmospheric Agency (NOAA) de EEUU, el Instituto de Conservación de Ballenas, Ocean Alliance, la Universidad de California Davis en EEUU y la Fundación Vida Silvestre Argentina. Además cuenta con la asistencia de seguridad en el agua de la Prefectura Naval Argentina. El Gobierno de la Provincia de Chubut aprobó la realización del proyecto y actúa a través de la Dirección de Fauna y Flora Silvestre dependiente del Ministerio de Desarrollo Territorial y Sectores Productivos, el Ministerio de Ambiente y Control del Desarrollo Sustentable y la Secretaría de Turismo y Áreas Protegidas.
Fuente: Diario Jornada
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